Por Edgardo Cabrera
Las paellas de la pasarela morenista del viernes dejaron en claro quiénes son las “taparroscas” de la mandataria, y de estas, la y él ungidos para la final que se definirá en marzo próximo cuando Morena designe mediante encuesta a la defensora o defensor de la “cuarta transformación”.
Basta ver la fotografía difundida y distribuida por los canales oficiales del gobierno estatal. De los seis suspirantes solamente dos ocuparon la manos derecha y la izquierda de su jefa política: Josefina Rodríguez y Alfonso Sánchez, en tanto que los otros cuatro fueron acomodados atrás, como relleno, y dirán misa, pero la forma es fondo.
Ya lo anticipaba la semana pasada, la próxima semana el lorenismo hará su encuesta del descarte para sacudirse a ilusos y arribistas que solamente se metieron en pos de una candidatura legislativa, se sienten merecedores aunque en su vida hayan ganado siquiera una elección, al menos de la sociedad de padres de familia, como en el caso del de Educación.
Aunque, vale decir, hay una carta lorenista tapada que podría colarse al final en la encuesta, tal y como ocurrió tras su llegada a la Junta de Coordinación, siendo diputada local, y después a la dirigencia de Morena, cuando daban a Marcela González derrotada políticamente.
Por lo pronto su jefa ya tiene mujer y varón para competirle a los morenistas NO lorenistas en la medición de marzo: la senadora Ana Lilia Rivera, puntera en las encuestas tempraneras; y el desconocido pero poderoso secretario de Finanzas del Estado de México, Oscar Flores, impulsado por la ex diputada federal, Dulce Silva. Lo peor de la guerra de estiércol está por venir.
SOLO DE PAELLERO
En eso de los ilusos, el otro cuñado de la gobernadora, el que cobra como legislador federal, no fue convidado a la foto oficial, aunque sí a las paellas morenistas, pero como cocinero. Ya que la casta privilegiada no lo peló, se resignó a subir sus propias imágenes para dejar constancia de asistencia, semanas atrás, por cierto, así como aparecieron sus bardas de promoción, fueron borradas.
PENOSO
En eso de nuestros legisladores federales, vaya exhibida que este lunes le dio el diario El Universal a la paisana Mariana Jiménez Zamora al colocarla en el top ten de los diputados “más faltistas” con 60 de 73 asistencias que debe tener, por cierto, tampoco la recordamos por alguna aportación significativa a la legislatura o al estado de Tlaxcala.
Mariana llegó por la vía plurinominal y como regalo del PAN, partido al que traicionó para convertirse en integrante de Movimiento Ciudadano otorgándole este día notoriedad por sus inasistencias, incluso a las sesiones home office, como destacó el diario nacional.
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