Con la novedad que con la triste historia las cuentas públicas se negocian directamente con la mandamás, lo que constituye además un claro acto de corrupción y chantaje. Resulta que fuera de toda legalidad y normatividad los alcaldes fueron citados para revisar el ejercicio de sus recursos públicos del año pasado.
Ese cónclave es ilegal, por donde se le vea, porque los facultados por ley para dicha revisión son tanto el Congreso del Estado como el Órgano de Fiscalización Superior, así que la injerencia del Ejecutivo en este tema se traduce también como un acto de intimidación y venta de favores.
Nos cuentan algunos de los presentes en esa reunión que se sintieron condicionados de cara a las elecciones del 2024, y es que el partido oficial no puede presumir en este momento arrasar en la contienda por las alcaldías y diputaciones locales, de ahí la urgencia de amarrar a los presidentes municipales en funciones para que les pongan a su disposición sus recursos políticos, económicos y humanos.
Y la preocupación no es menor, porque en las encuestas no pagadas ni maquilladas, la señora se desplomó en su popularidad, está en el sótano y nadie cree aquel sondeo telefónico cuchareado que le publican los medios paleros donde la ponen en los cuernos de la luna, en los hechos el gobierno trae pésimos resultados en seguridad, procuración de justicia, gobernabilidad, solo por citar tres rubros que aparecen como las principales preocupaciones de la sociedad.
El mejor indicador de la molestia son las recurrentes protestas de grupos y sectores sociales, como el 1 y el 15 de mayo donde hasta niños salieron a quejarse por la insensibilidad de este gobierno, pero también hay bloqueos carreteros por pedir algo tan elemental como agua potable, seguridad y justicia.
DESINFORMADA
Más allá de la vergüenza, el martes quedó en evidencia que a Lorena Cuéllar no le informan, ya no hablemos si bien o mal, simple y sencillamente es una mandataria que no trae datos de primera mano e inmediatos.
Resulta que por la mañana en la “mañanera” de López Obrador, se dieron a conocer los datos sobre incidencia delictiva en el país, de donde se desprende que Yucatán se colocó en el primer lugar de entidades con menos delitos, desplazando así a Tlaxcala al segundo lugar.
Cuestionada al respecto, molesta, Cuéllar afirmó que el estado que gobierna seguía en primer lugar, no solo eso, dijo que desde hace 9 meses se presentan los indicadores delictivos más bajos del país, y ambas cosas son una gran mentira.
En diciembre de 2022 y enero de 2023 ocupamos el segundo lugar, ahora en abril de nueva cuenta, así lo marcan las cifras oficiales, pero ahí no acaba el asunto, tampoco ha revisado ni le han dicho, que no es el mismo impacto y afectación a la sociedad por un robo de auto o lesiones, que los asesinatos.
Es en este rubro donde también Yucatán se mantiene como la entidad como el menor número de homicidios dolosos, y Tlaxcala sigue con cifras superiores no solo a ese estado, sino a otros cuatro, y para mayo las cosas serán peores porque se le siguen acumulando los muertos a la Triste Historia que anda más ocupada en la politiquería y condicionando a los alcaldes utilizando el garrote fiscalizador que en ponerse a trabajar.
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